¿Has tenido de esos días que no quieres encender ni el microondas porque ya hace suficiente calor hasta para el diablo? Bueno, la ensalada de lentejas ha sido como un salvavidas para mí esos días. Es sencilla, fresca, y honestamente, llena bastante más que esas ensaladas flojas de solo lechuga. Lo mejor es que puedes prepararla con lo que tienes a la mano y sirve para el ‘tupper’ del trabajo o para quedar bien en alguna comida con amigos (nadie notará que no pasaste horas cocinando). Si te gustan las recetas prácticas también te van a encantar mi favorita de ensalada cremosa de pasta o, si buscas algo lleno de proteína, te recomiendo curiosear la ensalada burrito de pollo y alubias. Pero bueno, a lo que venimos.
La ensalada de lentejas es un plato súper conocido en países mediterráneos y en Latinoamérica, aunque creo que cada abuela le mete su toque. No hay una sola forma y esa es la magia. Aquí en México a veces le ponemos jitomate, cebolla morada y hasta aguacate. En España, he visto que la tiran con pimientos y huevo duro. Nadie se pelea con ella porque llena y además es barata.
Se suele comer fría, casi siempre como plato fuerte en primavera o verano. Otras veces, la puedes ver acompañando pescado o algún pollo a la plancha. (Ay, unos días ni fuerzas para eso tengo, te soy sincero.) Para mí, resulta una joyita para el ‘meal prep’. Sirves una porción, agregas limón fresco y listo. Cero complicaciones.
Proceso para preparar ensalada de lentejas
La preparación de este platillo es la mar de sencilla, pero tiene su gracia. Lo primero, claro, es cocer las lentejas. Que ni se te ocurra agregar sal al principio porque se endurecen (vaya que aprendí eso por las malas). Yo dejo las lentejas cocidas, las enjuago, y luego empieza la parte divertida: mezclar con los ingredientes frescos. La vinagreta es la chispa, no te confíes solo al aceite de oliva, métele limón o vinagre, aunque una vez usé balsámico y fue un accidente delicioso.
Hay quienes dejan las lentejas reposar ya mezcladas unas horas en el refri, así los sabores se llevan mejor. De veras, te juro que mejora un montón con un poquito de tiempo. Si las comes luego-luego tampoco pasa nada, pero si tienes paciencia, verás la diferencia.
Cómo Preparar ensalada de lentejas
Te paso mi versión favorita, la que no tiene falla y puedes ajustar como quieras:
Ingredientes:
- 200 g de lentejas
- Agua (suficiente para cocer las lentejas)
- 1 jitomate (tomate rojo)
- ½ cebolla morada
- 1 puñado de cilantro fresco
- ½ zanahoria (opcional)
- Pepino (opcional, al gusto)
- Jugo de 1 o 2 limones
- 1 cucharada de aceite de oliva
- Sal al gusto
- Comino en polvo (opcional, al gusto)
Instrucciones:
- Lava 200g de lentejas y ponlas a cocer con agua suficiente, sin sal, por aproximadamente 20 minutos (prueba que estén suaves, pero que no se deshagan).
- Cuando estén listas, escúrrelas y enjuágalas con agua fría para cortar la cocción.
- Pica chiquito 1 jitomate, media cebolla morada, un puñado de cilantro, y si tienes, media zanahoria en cubitos pequeños. Si te vuelas la barda, agrega un poco de pepino.
- Mezcla todo con las lentejas frías en un tazón grande.
- Exprímele el jugo de uno o dos limones, una cucharada de aceite de oliva, sal al gusto y, si te animas, un toque de comino en polvo.
- Revuelve bien y prueba todo (así como los chefs, pero aquí en tu cocina).
- Sirve frío, o guarda en el refri hasta la hora de comer. Deja reposar una hora si puedes.
Opcional: medio aguacate en cubos o algo de chile picado si te gusta el toque picoso.
Sustituciones Posibles
Lo práctico de la ensalada de lentejas es que no necesitas ser purista. ¿No tienes cilantro? Pues ponle perejil. ¿No hay jitomate? Pimiento funciona igual de bien. Hasta garbanzos pueden entrar al relevo si de plano se te acabaron las lentejas (aunque, bueno… pierde el nombre, ¿no?). Hay quienes usan vinagre balsámico o manzana cuando el común escasea. Y si eres vegano o algo así, tampoco hay trucos raros: ya lo es, solo vigila el aderezo.
Para que no te quedes sin ideas, puedes ver la ensalada cremosa de pepino que también permite mil cambios. No te compliques la existencia, hazlo fácil y disfruta más.
Utensilios Necesarios
- Olla pequeña para cocer las lentejas.
- Colador (básico, en serio).
- Tabla de picar y cuchillo afilado.
- Tazón grande para mezclar.
- Cucharas de servir y para probar (obvio).
Consejos para mejores resultados
Con qué acompañar ensalada de lentejas
Está buenísima con un poco de atún o huevo duro encima, especialmente para la comida de media semana.
Presenta tu ensalada en hojas de lechuga grandes, como tacos pero saludables.
Consejos de Almacenamiento
Si te sobra, guarda en un recipiente cerrado en el refri y aguanta bien hasta por tres días.
No la congeles, porque queda rarezona. Sírvela fría para esos días de calor o como entrada cuando tienes visitas. Y si quieres presumir, añade unos gajos de naranja o queso feta por ahí.
Variaciones de ensalada de lentejas
Hay infinidad de vueltas que puedes darle. En invierno, mete un poco de calabaza asada o hasta manzana verde, juro que sorprende. Para versiones más ligeras (rollo dieta keto), reduce la zanahoria y suma hojas verdes. Si eres de sabores fuertes, mete aceitunas, alcaparras o bastante cebollita encurtida. Hay quien hasta la mezcla con arroz integral u otros granos, ahí depende si quieres plato único o solo acompañamiento.
A mí, por ejemplo, en verano me gusta echarle un extra de apio y pepino, para el crunch y frescura (además, sí, bajo calor cualquiera busca algo que enfríe).
La ensalada de lentejas para todos los días
Así que la próxima vez que busques algo práctico, versátil y hasta barato, dale una oportunidad a la ensalada de lentejas. Es perfecta para quienes quieren comer rico sin meterse en líos de cocina. Si hay dudas todavía, te recomiendo ver este video de ENSALADA DE LENTEJAS FACIL Y SALUDABLE – YouTube. También te aseguro que la receta de Ensalada de lentejas, sana y deliciosa | Receta de Sergio tiene muy buenas ideas si te quieres poner ‘pro’. No lo pienses más: ¡prueba y verás!
(FAQ) Preguntas frecuentes
Puedes agregar cebolla, ajo, pimiento, tomate, limón, aceite de oliva, hierbas frescas como perejil o cilantro, y especias como comino o pimienta para darles más sabor.
La ensalada de lentejas es nutritiva, rica en proteínas, fibra, hierro y vitaminas. Ayuda a mejorar la digestión, da energía y es buena para el corazón.
Totalmente, es súper nutritiva y si le pones aguacate o elote suele gustarles aún más.
Unos tres días sin problema. Eso sí, si lleva aguacate, ese se oscurece.
Claro, solo enjuágalas bien. Más práctico imposible.

Ensalada de Lentejas
Ingredientes
Method
- Cocer las lentejas en agua sin sal durante aproximadamente 20 minutos, hasta que estén suaves pero no deshechas.
- Una vez cocidas, escurrirlas y enjuagarlas con agua fría para cortar la cocción.
- Picar el jitomate, cebolla morada, cilantro y zanahoria en cubitos pequeños y mezclarlos en un tazón grande junto con las lentejas frías.
- Añadir el jugo de limón, aceite de oliva, sal y comino al gusto, y mezclar bien.
- Dejar reposar en el refrigerador durante una hora si es posible, para que los sabores se integren.
- Servir frío, y opcionalmente agregar aguacate y chile picado antes de servir.