Tenders de Pollo Crujientes con Sabor a Parmesano

Cada vez que preparo estos Tenders de Pollo Crujientes con Sabor a Parmesano, me transporto a esos momentos acogedores de los domingos en familia. Recuerdo a mis hijos ansiosos en la mesa, esperando con emoción ese primer bocado. La cocina se llenaba con ese aroma irresistible que prometía una comida deliciosa. Estoy segura de que cuando tú los prepares, sentirás esa misma calidez y confort. ¡Es una receta que no solo nutre el cuerpo, sino también el alma!

Cómo preparar Tenders de Pollo Crujientes con Sabor a Parmesano

Ingredientes:

1 1/4 libras de tiras de pollo, sin piel y sin hueso: Este es el ingrediente principal, y la frescura del pollo hará toda la diferencia en la calidad de tu platillo. Siempre opto por pollo de buena calidad.
1/2 taza de harina blanca: La harina es esencial para darle esa textura crujiente cuando se fríe. También puedes usar harina integral si prefieres.
Sal y pimienta al gusto: No olvides sazonar bien, ¡esto resalta todos los sabores!
6 cucharadas de aceite de oliva o mantequilla derretida: Ambos son excelentes, pero el aceite de oliva le da un toque mediterráneo muy especial.
3 cucharaditas de ajo picado: El ajo es lo que realza el sabor de tu pollo. Puedes usar ajo en polvo si no tienes ajo fresco a mano.
1 cucharadita de albahaca seca: Esta hierba aromática aporta un sabor fresco que da vida al pollo.
1/4 cucharadita de pimentón: Este toque ahumado es esencial para un poco de profundidad de sabor.
1 taza de pan rallado Panko: La clave para esa textura crujiente. No escatimes en la cantidad.
2/3 taza de queso parmesano, recién rallado: Este es el ingrediente mágico que le dará ese sabor intenso. Siempre uso queso parmesano fresco; el de lata no sabe igual.

Nota personal: A mí me encanta agregar hierbas frescas como romero, ¡le da un aroma y sabor increíble al plato! Si tienes un huerto en casa, ¡es el momento perfecto para usar tus propias hierbas!

Pasos para la preparación

1. Preparar el Pollo

Comienza recortando el exceso de grasa de las tiras de pollo. Esto es importante para asegurarte de que el pollo se cocine de manera uniforme.

2. Preparar los Platillos

Prepara tres tazones:

En uno, pon la harina blanca con un poco de sal y pimienta.
En el siguiente, combina el aceite de oliva o la mantequilla derretida con el ajo picado y mezcla bien.
En el último tazón, mezcla la albahaca, el pimentón, el pan rallado Panko y el queso parmesano.

3. Ensuciarse las Manos

Es hora de ensuciarse las manos. Toma cada tira de pollo y sumérgela primero en la mezcla de harina, asegurándote de cubrirla completamente.

4. Baño de Ajo

Luego, sumerge la tira en la mezcla de aceite de ajo, asegurándote de que quede bien cubierta, ¡esto le dará mucho sabor!

5. Cubrir con Panko

Finalmente, cubre cada tira de pollo con la mezcla de Panko y queso parmesano. Presiona un poco para que se adhiera bien.

6. Precalentar la Freidora

Coloca los tenders en la cesta de la freidora de aire. Precalienta la freidora a 200 grados Celsius (400 grados Fahrenheit).

7. Cocinar el Pollo

Cocina los tenders durante 9 minutos y luego dales la vuelta. Cocina por otros 8-9 minutos o hasta que la temperatura interna alcance los 74 grados Celsius (165 grados Fahrenheit).

8. Retirar y Servir

Retíralos y disfrútalos al instante con tu salsa favorita. A nosotros nos encanta acompañarlos con una salsa de mostaza y miel, ¡una combinación perfecta!

Por qué me encanta preparar este platillo

Lo que más me encanta de estos Tenders de Pollo Crujientes es cómo logran hacer felices a todos en la mesa. No solo son crujientes y sabrosos, sino que también evocan recuerdos de reuniones familiares y celebraciones. Cada bocado me recuerda a las risas compartidas y a esos momentos en que todos están disfrutando de la comida que he preparado con tanto amor. Preparar este platillo es un acto de cariño, y ver las sonrisas en los rostros de mi familia es la mejor recompensa.

Qué necesitarás

Para preparar estos deliciosos tenders, necesitarás algunas herramientas básicas:

Freidora de aire: Esta herramienta hace que el pollo quede crujiente sin necesidad de mucho aceite.
Tazones para mezclar: Unos buenos tazones harán que sea una tarea mucho más sencilla.
Cuchillo y tabla de cortar: Para preparar el pollo y los ingredientes.

Consejos para mejores resultados

Para obtener una piel más crujiente, asegúrate de secar bien el pollo antes de empezar con la harina.
Si usas queso parmesano en polvo, trata de no excederte, ya que puede ser bastante salado.
No escatimes en el tiempo de cocción; la clave está en esperar hasta que el pollo esté bien dorado.

Sugerencias para servir

Estos tenders son maravillosamente versátiles. Te sugiero acompañarlos con:

Ensalada fresca: Un toque de lechuga, tomate y aguacate hace una combinación perfecta.
Puré de papas: Clásica y siempre querida en la mesa, ¡a todos encanta!
Salsas: Las opciones son infinitas: mayonesa, ketchup, o una salsa picante para los más aventureros.

Qué hacer con las sobras

A veces, nos quedan algunos tenders para el día siguiente. Me encanta calentar las sobras en el horno para que no pierdan textura, ¡es como comerlos recién hechos! Simplemente précalienta el horno y calienta a 180 grados Celsius (350 grados Fahrenheit) durante unos 10 minutos. Quedarán crujientes y deliciosos.

Preguntas Frecuentes

¿Puedo usar pollo sin hueso?
¡Por supuesto! Puedes hacerlo, pero créeme, la versión con hueso tiene mucho más sabor. He probado ambas, y la carne con hueso siempre es más jugosa.

¿Puedo preparar esto al horno?
Sí, si no tienes freidora de aire, puedes hornearlos a 200 grados Celsius (400 grados Fahrenheit) durante un tiempo un poco más largo, alrededor de 20-25 minutos. Solo asegúrate de darles la vuelta para que se doren por ambos lados.

¿Cómo sé si el pollo está bien cocido?
La mejor manera de comprobarlo es usando un termómetro de cocina. Asegúrate de que la temperatura interna llegue a 74 grados Celsius (165 grados Fahrenheit).

Conclusión

Estoy emocionada de que pruebes estos Tenders de Pollo Crujientes con Sabor a Parmesano. Esta receta se ha convertido en un favorito en mi casa, y estoy segura de que lo será en la tuya también. Es fácil de hacer y espectacular en sabor. Además, te invito a compartir tu experiencia: cuéntame cómo te quedó y si tu familia pide repetir, como sucede en mi casa cada vez. ¡No hay nada mejor que ver a nuestros seres queridos disfrutar de una comida hecha con amor! ¡Buen provecho!