Lasaña de Pollo y Brócoli

Lasaña de Pollo y Brócoli

Cada vez que preparo esta Lasaña de Pollo y Brócoli, me recuerda a los domingos en familia. ¡El aroma me transporta a esos momentos! En mi casa, siempre fue un día especial, donde nos reuníamos todos alrededor de la mesa, compartiendo risas y anécdotas. Esta receta no solo es una opción deliciosa, sino que también trae consigo una cálida nostalgia de esos almuerzos que parecían no tener fin. Estoy segura de que, cuando la prepares, sentirás la misma calidez y confort que yo.

Cómo preparar Lasaña de Pollo y Brócoli

Ingredientes:

• 9 láminas de lasaña: son la base de este platillo. Las láminas cocidas permiten que todos los sabores se fusionen.
• 4 pechugas de pollo deshuesadas, cortadas en trozos pequeños: el pollo es la estrella de esta lasaña, dándole sustancia y sabor.
• 1 bolsa de 12 oz. de brócoli congelado, descongelado: el brócoli no solo aportará color, sino que también es una fuente de nutrientes.
• 8 oz. de queso mozzarella rallado: el queso es fundamental para dar cremosidad y un toque delicioso.
• 1 taza de queso parmesano rallado: este queso agrega un sabor salado que realza el plato.
• 1 cebolla pequeña, picada: la cebolla aporta un dulzor natural al cocinarla.
• 2 dientes de ajo, picados: el ajo le dará un toque aromático y sabroso a la carne y las verduras.
• 1/4 cucharadita más 1 cucharada de sal: la sal es esencial para resaltar todos los sabores de los ingredientes.
• 1 taza de caldo de pollo: este líquido es clave para darle un equilibrio perfecto de sabores.
• 1 1/2 tazas de leche entera: la leche añade cremosidad a nuestra salsa.
• 1 cucharadita de albahaca seca: hierbas secas aportan un aroma delicioso que recuerda al verano.
• 2 cucharaditas de aceite de oliva: el aceite es ideal para cocinar y le da un toque mediterráneo al plato.
• 5 cucharadas de mantequilla: la mantequilla hará que la salsa sea rica y sedosa.
• 5 cucharaditas de harina: es la base de nuestro roux, que ayudará a espesar la salsa.

Nota personal: A mí me encanta agregar hierbas frescas como romero, ¡le da un aroma y sabor increíble al plato!

Pasos para la preparación

1. Cocina la pasta: En una olla grande, hierve agua con una pizca de sal. Cocina las láminas de lasaña hasta que estén al dente según las instrucciones del paquete. Escurre y enjuaga la pasta con agua fría para evitar que se pegue, luego ponla a un lado.

2. Prepara el pollo y las verduras: En una sartén mediana, calienta el aceite de oliva a fuego medio y cocina los trozos de pollo hasta que estén dorados y completamente cocidos. Agrega el brócoli descongelado, la cebolla y el ajo picados, cocinando hasta que las cebollas estén translúcidas y el brócoli esté tierno. Retira del fuego y reserva.

3. Haz la salsa Alfredo: En otra olla, derrite la mantequilla a fuego medio y mezcla la harina, cocinando por un minuto para formar un roux. Agrega gradualmente el caldo de pollo y la leche, batiendo constantemente hasta que la salsa espese y quede suave.

4. Sazona la salsa: Añade la albahaca, la sal, el queso parmesano rallado y parte del queso mozzarella. Remueve con cuidado hasta que el queso se derrita y la salsa esté cremosa.

5. Mezcla el pollo, las verduras y la salsa: Combina la mezcla de pollo y brócoli con la salsa Alfredo. Asegúrate de que estén bien integrados para que cada bocado esté lleno de sabor.

6. Arma la lasaña: En un molde engrasado, alterna capas de pasta cocida y la mezcla de pollo y brócoli, terminando con una capa de pasta para que todo esté bien compacto.

7. Cubre con queso: Espolvorea el queso mozzarella restante sobre la última capa de pasta. ¡No escatimes en el queso, que es lo mejor!

8. Hornear: Precalienta el horno a 375°F (190°C) y hornea la lasaña durante aproximadamente 30 minutos hasta que esté dorada y burbujeante. No hay nada como oír el chisporroteo del queso en el horno.

9. Deja reposar: Después de sacar la lasaña del horno, deja que repose unos minutos antes de servir. Esto ayudará a que se asiente y sea más fácil de cortar.

Por qué me encanta preparar este platillo: La Lasaña de Pollo y Brócoli es un platillo que no solo llena el estómago, sino también el corazón. Me encanta prepararla porque es una forma de reunir a la familia en torno a la mesa, compartiendo anécdotas y risas. Cada bocado está lleno de amor y dedicación, y no hay nada más gratificante que ver las sonrisas en los rostros de mis seres queridos al disfrutar de un buen platillo hecho en casa.

Qué necesitarás: Para preparar esta deliciosa lasaña, necesitarás una olla grande, una sartén mediana, un cuchillo afilado para picar los ingredientes y un molde para hornear. También es útil tener espátulas y un batidor de varillas a mano.

Consejos para mejores resultados:

• Textura crujiente: Si deseas una textura más crujiente en la parte superior, puedes gratinar la lasaña en los últimos minutos de cocción. Ponla en la parrilla del horno.
• Carne jugosa: Para que el pollo quede más jugoso, puedes marinarlo previamente con un poco de aceite de oliva y especias.

Sugerencias para servir: Esta lasaña se complementa perfectamente con una ensalada fresca o una simple guarnición de pan de ajo. A mí me encanta añadir una crema de pesto por encima antes de servir. ¡Le da un toque tan especial!

Qué hacer con las sobras: Las sobras de la lasaña son igual de deliciosas. Puedes almacenarlas en un recipiente hermético en el refrigerador. Para recalentar, me encanta hacerlo en el horno para que no pierdan textura. ¡Es como comerlo recién hecho!

Preguntas Frecuentes: ¿Puedo usar pollo sin hueso? Puedes hacerlo, pero créeme, la versión con hueso tiene mucho más sabor. He probado ambas, ¡y la carne con hueso siempre es más jugosa!

¿Puedo usar otro vegetal en lugar de brócoli? ¡Por supuesto! Puedes experimentar con espinacas, champiñones o cualquier verdura que te guste.

¿Se puede congelar la lasaña? Sí, puedes congelar la lasaña antes de hornearla. Simplemente cubre bien el molde y guárdalo en el congelador. Cuando estés lista para disfrutarla, solo tienes que hornearla directamente desde el congelador, pero puede tomar un poco más de tiempo.

Este platillo se ha convertido en un favorito en mi casa, y estoy emocionada de que lo pruebes. Estoy segura de que te encantará tanto como a mí. Cada vez que lo preparo, es una nueva oportunidad de crear recuerdos inolvidables con tus seres queridos. Cuéntame cómo te quedó y si tu familia pide repetir, como sucede en mi caso cada vez. ¡Disfruta de cada bocado que prepares!